Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

I Samuel 15, 14-22

14 Pero Samuel preguntó: «¿Y qué son esos balidos que vienen a mis
oídos y esos mugidos que oigo?»

15 Respondió Saúl: «Los hemos traído de Amalec porque el pueblo ha
perdonado lo mejor del ganado mayor y menor con intención de ofrecerlo
en sacrificio a Yahveh tu Dios. Cuanto a lo demás, lo hemos entregado al
anatema.»

16 Pero Samuel dijo a Saúl: «Basta ya y deja que te anuncie lo que
Yahveh me ha revelado esta noche.» El le dijo: «Habla.»

17 Entonces Samuel dijo: «Aunque tú eres pequeño a tus propios ojos

¿no eres el jefe de las tribus de Israel? Yahveh te ha ungido rey de Israel.

18 Yahveh te ha enviado por el camino y te ha dicho: “Vete, y
consagra al anatema a estos pecadores, los amalecitas, hazles la guerra hasta
el exterminio”.

19 Por qué no has escuchado a Yahveh? ¿Por qué te has lanzado sobre
el botín y has hecho lo que desagrada a Yahveh?»

20 Saúl respondió a Samuel: «¡Yo he obedecido a Yahveh! Anduve
por el camino por el que me envió, he traído a Agag, rey de Amalec, y he
entregado al anatema a los amalecitas.

21 Del botín, el pueblo ha tomado el ganado mayor y menor, lo mejor
del anatema, para sacrificarlo a Yahveh tu Dios en Guilgal.»

22 Pero Samuel dijo: ¿Acaso se complace Yahveh en los holocaustos
y sacrificios como en la obediencia a la palabra de Yahveh? Mejor es
obedecer que sacrificar, mejor la docilidad que la grasa de los carneros.